domingo, 26 de julio de 2009

Movimientos sociales y el Miedo

Nuestras mal llamadas "autoridades" (prefiero llamarlos representantes, a pesar de que cada vez me queda más claro que sólo se representan a ellos mismos), no podrán negarse a la existencia de movimientos sociales organizados que, indiferentes a las peleas políticas de poca monta y escaso contenido propositivo estan trabajando activamente en la generación de propuestas para cambiar aquellas cosas que podriamos llamar: injusticias, inequidad, patudez, frescura, inconciencia, etc.
Nuestra sociedad, que cada vez funciona menos como lo que es, una "SOCIEDAD", en donde todos debiesemos estar involucrados y atentos a los acontecimientos que nos afectan directamente, incluso aquellos que podrían poner en riesgo su tranquila condición de "socio", se mantiene dormida, confiada y rezongona de las soluciones que les debe ofrecer el gobierno...
Cuando comprendí como funciona el mundo y por ende su sistema económico (corazón del mismo), me dí cuenta que había crecido y que el señor de gorra, chaqueta y pantalones rojos, que acarrea un gran vientre (de tanto tomar aquel tóxico brebaje negro debe ser...) no existe y que el gobierno por consecuencia no solucionaría nada, me dije ups! tenemos un gran problema, pense un rato más y me dije: el problema tiene solución, por lo tanto ya no es un problema.
La solución: hacerse cargo de los errores cometidos, el mayor de todos: el MIEDO, es verdad que hemos pasado por épocas difíciles, pero basta de llorar sobre la leche derramada (y la sangre) y continuemos nuestra lucha, una lucha personal en la búsqueda de la conciencia, de la responsabilidad social, del futuro de nuestros hijos, nietos y bisnietos. Perder el miedo a opinar, a manifestarse, a proponer las soluciones que creo me beneficiarán, y a mi hermano y a mi vecino, expresar las ideas, reconocer los errores.
Por años los agricultores y campesinos han confiado en los agroquímicos como la panacea para obtener buenas cosechas y buenos dividendos económicos, atrevámonos a pensar en economías diferentes a las basadas en el dinero y las utilidades, a erradicar los fertilizantes y pesticidas químicos y confiar en la naturaleza que nunca nos ha fallado (a pesar de que los intentos por destruirla han sido maquiavélicos), los fertilizantes orgánicos SÍ funcionan, asumamos las consecuencias de nuestros errores y arriesguemonos a tener menores cosechas, es nuestra responsabilidad, pero sin dejar de buscar alternativas y soluciones en la naturaleza, allí es donde estan todas las respuestas.
A todos los movimientos sociales, fuerza hermanos, estamos con ustedes, lograremos devolverle la tierra a la naturaleza y a nuestros hijos y nietos, estamos trabajando en equipo, organizados, no nos mueve el dinero, sino el AMOR, alguien dijo que es más fuerte, otro dijo que es Dios..., propongamos, el pasado sólo es útil cuando lo utilizamos para no cometer errores en el presente, escuchen a los jovenes que los respetan y acompañan en su camino, tenemos las herramientas, confiemos en nosotros y en nuestro poder, juntos seremos capaces de generar el cambio que deseamos, invitemos a los socios dormidos a participar y no los juzguemos, nos acompañarán cuando sea el momento preciso.
Finalmente reflexionar sobre un principio de la permacultura, "Usa soluciones lentas y pequeñas", es muy probable que la conversación y/o reunión vecinal o gremial sea más provechosa que la reuniones con aquella "alta autoridad", confía en tu vecino, lo conoces desde siempre (con defectos y virtudes).
Bendiciones para este nuevo año de la Semilla Auto-existente, hubo alguna vez una generación de terrícolas que se extinguió hace algunos siglos y pensó que todo cambiaría por estos años, de nosotros depende hacer el sueño realidad.

Fabiola Salazar L.